…Para El Que No Vea, Vea

Por: Sergio Osegueda

“Y Jesús dijo: Yo vine a este mundo para juicio; para que los que no ven, vean, y para que los que ven se vuelvan ciegos”

Dios nos abre los ojos del alama a través de Cristo Jesús, aumentar nuestra fe pese a las vicisitudes de la vida, ver más allá de los ojos del cuerpo, quitarnos la ceguera que desde nacimiento traemos en nuestras almas y descubrir en Cristo la verdadera vida.

Con este mensaje, la consagrada imagen de Jesús Nazareno de la Justicia ha llegado a los corazones de las personas que como cada segundo domingo de cuaresma han salido a las calles para venerarlo y llevarlo en hombros.

Una concurrencia que se ha reunido en las afueras del templo de el Calvario en punto de las 9 de la mañana para presenciar la imponente salida del Nazareno, que al sonido de las notas de In Memoriam ha iniciado su cortejo procesional.

Con alfombras y precedido por el escuadrón de nazarenos, palestinos y romanos, el cortejo se iba abriendo paso por las calles y avenidas estipuladas para el paso de la procesión que en sus diferentes cambios, ha implementado el llevar en hombros de los Nazarenos, la imagen de Cristo Flagelado.

En un recorrido de 12 horas, el Nazareno de la Justicia, obra de Juan Ganuza, paso por diferentes calles y avenidas del centro histórico, donde toda la feligresía se hizo presente para elevar oraciones, agradecimientos, peticiones, pero todos con el fin de acercarse a Dios.

Aunque en su momento las andas procesionales también mostraban su paso, esto no fue impedimento para que todos pudieran llevar en mas de una ocasión sobre sus hombros a la imagen de sus amores.

Al puntualizar las 9 de la noche con 30 minutos, el nazareno realiza su ingreso al templo habiendo cumplido un segundo domingo de cuaresma mas con su misión de evangelizar y bendecir a todo el mundo.